9 de Julio: entre la memoria histórica y el proyecto de nación
9 julio, 2025
El historiador Hernán Herari, en diálogo con “Ventura Show”, analizó el peso simbólico y político del Día de la Independencia, el contexto del Congreso de Tucumán y el complejo entramado territorial y social en el que se gestó la declaración de 1816.
¿Qué celebramos realmente cada 9 de julio? Para el historiador Hernán Herari, la fecha condensa mucho más que la simple declaración formal de la independencia de las Provincias Unidas. En el programa Ventura Show, Herari explicó que el valor simbólico del 9 de julio se afianza recién a partir del gobierno de Rosas, casi dos décadas después de 1816, cuando se empieza a conmemorar con tedeums y ceremonias públicas.
El especialista señaló que el Congreso de Tucumán nació en un contexto geopolítico adverso, tanto a nivel internacional como interno. Mientras en Europa regresaban las monarquías absolutas y las revoluciones eran reprimidas en América, la única insurgencia aún viva era la del Río de la Plata. Incluso dentro del territorio, la unidad era frágil: provincias como Santa Fe, Entre Ríos y Corrientes no participaron del Congreso por estar alineadas con el artiguismo.
La elección de Tucumán como sede respondió más a cuestiones estratégicas que simbólicas: Buenos Aires era un foco de posibles invasiones, tanto externas como de provincias enfrentadas.
“Era muy difícil incluso llegar físicamente a Tucumán porque el camino estaba cortado”, agregó Herari.
Ante la pregunta de si la historia la cuentan los que ganan, Herari distinguió entre el uso político de la historia y el conocimiento científico, asegurando que, con el tiempo, los hechos tienden a imponerse sobre las versiones interesadas.
“Hoy hay quienes cuestionan si lo que surgió en 1816 era una nación. Yo digo que no era Argentina aún, pero sí había un proyecto de nación en construcción”, explicó.
